Persona: - ¿Tiene cambio de 50 euros?
Espécimen: - Uuuuuuuf, ¡pues va a estar complicado!
Persona: - Vaya, bueno, puedo pagarle con tarjeta.
Espécimen: - ¡Ah! No. No tengo el terminal. Para año y medio que me queda de trabajo... no lo pongo. Yo no hago ese desembolso mientras no me obliguen.
Persona: - Pues es que acabo de sacar dinero en efectivo del cajero y me ha dado billetes de 50.
Espécimen: - Pues no saques múltiplos de 50 ¿no?. O sácalo en dos veces.
Persona: - Bueno, en realidad saco lo que necesito.
Espécimen:- Pues no, si quieres sacar 100, pues sacas 120, y así seguro que te da billetes más pequeños.
Persona: .... (pensando que quién es para decirme cuánto tengo que sacar y cómo. ¿Y si no tengo más en mi cuenta? ¿Y si el cajero (bastante habitual) sólo tiene billetes de 50 euros?)...
Seguramente ya sabéis a quién corresponde cada uno de los actores. Por si acaso, el espécimen es un taxista.
Han sido tantas las veces que he estado en situaciones similares (demasiadas, diría que aproximadamente un 90% de mis viajes en taxi se han desarrollado en contextos similares), que me dediqué a buscar la ley vigente de los taxis en Madrid, con el objetivo de poder responder a alguna de estas situaciones. Como no seré la única, ahí va mi aportación, extraída del Portal de Consumidor de la Comunidad de Madrid (muy interesante, no sólo por el apartado dedicado a los taxis):
"Según la ley, los taxistas sólo tienen obligación de proporcionar cambio al usuario hasta la cantidad de 20 euros. En el caso de que el conductor tuviera que abandonar el vehículo para dar cambio por una cantidad inferior a ese importe estará en la obligación de detener el taxímetro. Cuando sea el usuario el que efectúe el pago con una cantidad que suponga devolver un cambio superior a 20 euros, será su obligación conseguir el importe correspondiente y durante el tiempo invertido para obtenerlo seguirá funcionando el taxímetro."
(Bien es cierto que el taxista, cuando me respondió, no sabía cuánto me iba a tener que devolver, pues no sabíamos cuánto iba a costar la carrera.)
Por otro lado, actualmente en Madrid, no es obligatorio que los taxis lleven el lector de tarjetas de débito/crédito (no aparece entre las obligaciones del prestador del servicio), si bien aquellos que pertenecen a alguna emisora de radio taxi y presentan el distintivo de cobro con tarjeta, nunca podrán negártelo (podéis amenazar con que llamaréis a la emisora correspondiente, y debéis fijaros que el distintivo aparezca en alguna parte - habitualmente luna trasera o ventanillas trasteras).
Dado que es muy habitual que durante largas temporadas tenga que coger 2 o incluso 3 taxis al día, y que no tengo muchas alternativas de protesta, mi política a partir de ahora será la siguiente:
1º.-Preguntar si puedo pagar con tarjeta o con un billete de 50 euros (no me parece un billete tan raro hoy en día; si fuera de 100 euros lo entendería) antes de montar en el taxi. Si no es posible, busco otro taxi. Ya espabilarán. Taxis, de día, hay a miles.
2º.- Si no hay más remedio y tengo que coger un taxi que no me permite pagar con tarjeta ni con 50 euros, miraré detenidamente la limpieza del mismo, llegando a poner una reclamación si es necesario, por ejemplo, en base a las obligaciones de los prestadores de este servicio: "Mantener el vehículo en buen estado, de tal forma que su utilización se produzca en condiciones dignas de seguridad e higiene ".
3º.- Si en alguna ocasión me preguntan si se cómo ir a mi destino (ojo, no por dónde, sino cuando no saben ni de qué calle le estoy hablando y no llevan GPS), contestaré que ese problema lo pueden solucionar con su callejero obligatorio ("Disponer de plano y callejero de la ciudad o GPS que lo sustituya."). Si no lo llevan, pondré una reclamación o buscaré otro taxi.
4º.- Cuando me hagan un recibo de esos que sólo pone el importe, número de licencia y la fecha, solicitar que me rellenen todos los campos obligatorios: "[...] número de licencia, NIF, matrícula del vehículo, precio de la carrera, fecha y firma del taxista. Es recomendable pedirla siempre, ya que es una garantía importante si se quiere reclamar."
Pudiera resultar engorroso, pero personalmente estoy muy muy harta de tan mal servicio recibido en general y hasta que la ley cambie, esto seguirá así. Me parece increíble que no se haya generalizado el uso de lectores de tarjeta en este sector. Aprovecho para indicar que en ningún momento me he quejado de las tarifas vigentes.
Aún a pesar del comienzo de esta entrada, no quiero olvidarme de todos aquellos (pocos) taxistas que me han dado un servicio estupendo, he podido pagarles de cualquier manera (no en especie :P) y tenían un coche limpio y sin olor a rancio.
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